El cauce del río se va afinando hasta llegar a un ancho tal que solo puede pasar una persona. Era un río en el que abundaban las nutrias y de ahí su nombre: “Pasaje de las nutrias”. La historia de la comunidad que se asentaba a orillas del río se entrelazaba con esa fauna volviéndose una sola cosa inseparable. Decían que las nutrias les habían enseñado a cazar en grupo: cada una llevaba su presa a la orilla, pero solo una era elegida para romper el caparazón de los cangrejos con la misma piedra. En cuestión de pocos años, la comunidad consideró al río y su devoto tributo a las nutrias, el escenario y símbolo predilecto para realizar una ceremonia de consagración y con ello elegir a su líder. El punto de partida era, por supuesto, la orfandad de mando. Como buena comunidad, el modo de pensarse sí misma era en conjunto: la figura del «Nosotros» se alzaba por encima de la de cada uno de sus integrantes. Precisamente por eso, resultaba necesario que hubiera un líder que personificara esa c...
En la introducción de Mundo loco. Guerra, cine, sexo , Žižek presenta las razones que lo llevaron a titular su obra de esta manera: se trata de un gesto intertextual con la noción de mapeo cognitivo desarrollada por su siempre citado Fredric Jameson, que refiere a la capacidad para orientarnos globalmente, comprender quiénes somos y hacia dónde nos dirigimos. Contrariándolo, el autor esloveno afirma que hoy vivimos y nos relacionamos con el mundo en el marco de una ausencia de mapas cognitivos. Hemos perdido los consensos que nos ayudaban a entender y proyectar nuestro lugar —en tanto comunidad humana— en el mundo, que Émile Durkheim englobaba bajo la noción de conciencia colectiva. Žižek propone un rápido diagnóstico del presente, en torno a la aún persistente dicotomía entre izquierda y derecha. En su lugar, afirma, surgen nuevas polaridades: la oposición entre una especie de gran partido tecnocrático , conducido por el conocimiento experto y las soluciones ...